EMBARQUE PARA CENA Y BAILE
Embarque en el legendario Venice Simplon-Orient-Express y acomódese en su cómodo camarote. Diríjase a uno de los bellamente restaurados vagones restaurante para disfrutar de una suntuosa cena, preparada con los ingredientes más frescos de temporada por nuestros expertos chefs de a bordo.
Después, quizás desee unirse a la diversión con otros pasajeros en el elegante vagón bar 3674, escuchando al pianista tocar en el piano de cola. De vuelta a su camarote, lo encontrará transformado en un cómodo dormitorio.
AMANECE UN NUEVO DÍA...
Su camarero le sirve un desayuno francés en su camarote, mientras contempla por la ventana el magnífico paisaje. Picos alpinos, praderas onduladas y lagos cristalinos le acompañarán mientras se relaja con un almuerzo de tres platos.
Por la tarde, aproveche para echar un vistazo a nuestra tienda a bordo y llevarse un recuerdo exclusivo de su viaje. Mientras recorre la pintoresca campiña húngara, disfrute de las vistas con pastas, té o café antes de llegar a Budapest.
Embarcar a bordo del Venice Simplon Orient Express no consiste en tomar cualquier tren en marcha. 17 vagones azul y oro surcan Europa durante más de 30 semanas al año. El Venice Simplon Orient Express posee 11 coches-cama construidos entre 1926 y 1931. Para vivir esta aventura como antaño, los cuartos de aseo han sido restaurados identicamente y ofrecen agua caliente producida por estufas pequeñas. Los otros vagones del tren también les sumergirán en la época de « los años locos » ya que cada detalle ha sido estudiado para seguir siendo fiel al tren de aquella época... el tiempo queda suspendido... y la elegancia del lugar y de sus compañeros de viaje les transporta hacia otra dimensión, otro tiempo...
Sus comidas a bordo serán inolvidables. La luz ligeramente filtrada crea el ambiente y los manteles bordados, los vasos de cristal y los cubiertos de plata les invitan a una cena de la que se acordarán toda su vida. Los menús combinan ingeniosamente las gastronomías francesa e italiana, la influencia de una o de otra haciéndose sentir aún más según el sentido del tren. La calidad de los platos, añadida a la belleza del decorado, explica que el tren se haya reconocido como miembro de honor de « Relais et Châteaux ».